Nuestro sitio web utiliza cookies para mejorar y personalizar su experiencia y para mostrar anuncios (si los hay). Nuestro sitio web también puede incluir cookies de terceros como Google Adsense, Google Analytics, Youtube. Al utilizar el sitio web, usted acepta el uso de cookies. Hemos actualizado nuestra Política de Privacidad. Haga clic en el botón para consultar nuestra Política de privacidad.

FAA inicia pesquisa tras la explosión del Starship en vuelo

El 16 de enero de 2025, en su séptimo intento de vuelo, el cohete Starship de SpaceX experimentó una explosión en su segunda fase, desintegrándose a una altura de 143 kilómetros sobre el Caribe. Este evento causó una lluvia de fragmentos ardientes que impactó en las Islas Turcas y Caicos, causando daños materiales y obligando a redirigir vuelos en la zona.

La explosión se produjo cerca de ocho minutos después de haber despegado de las instalaciones de SpaceX en Texas. A pesar de que el propulsor Super Heavy consiguió regresar y aterrizar con éxito, la comunicación con la nave Starship se perdió, confirmándose más tarde su desintegración. Videos grabados por habitantes locales mostraron fragmentos luminosos cruzando el cielo nocturno, demostrando la magnitud del suceso.

La explosión ocurrió aproximadamente ocho minutos después del despegue desde las instalaciones de SpaceX en Texas. Aunque el propulsor Super Heavy logró regresar y aterrizar exitosamente, la nave Starship perdió comunicación y posteriormente se confirmó su desintegración. Videos capturados por residentes locales mostraron fragmentos brillantes atravesando el cielo nocturno, evidenciando la magnitud del incidente.

La Administración Federal de Aviación de Estados Unidos (FAA) ha iniciado una investigación para determinar las causas del fallo y evaluar las medidas correctivas necesarias. Como resultado, todos los vuelos del Starship han sido suspendidos hasta nuevo aviso. La FAA supervisará la investigación y revisará los procedimientos de seguridad antes de autorizar futuros lanzamientos.

Elon Musk, fundador y CEO de SpaceX, ha mantenido un enfoque positivo tras el suceso, destacando que, aunque el éxito no está asegurado, cada prueba ofrece datos valiosos para optimizar el diseño y la funcionalidad del Starship. La empresa tiene previsto llevar a cabo al menos otros dos docenas de vuelos de prueba en 2025, siempre que la FAA levante la suspensión vigente.

La detonación ha suscitado inquietudes ambientales y de seguridad en las comunidades cercanas a la zona de pruebas. Las autoridades locales y organizaciones ambientales están examinando el impacto de los fragmentos en la flora y fauna de la región, además de los potenciales riesgos para la salud humana. La FAA ha manifestado que supervisará las labores de limpieza y mitigación de los daños en las áreas perjudicadas.

La explosión también ha generado preocupaciones ambientales y de seguridad en las comunidades cercanas al área de prueba. Las autoridades locales y organizaciones medioambientales están evaluando el impacto de los escombros en la fauna y flora de la región, así como los posibles riesgos para la salud humana. La FAA ha indicado que supervisará las labores de limpieza y mitigación de daños en las áreas afectadas.

Este incidente subraya los desafíos inherentes al desarrollo de nuevas tecnologías espaciales. Cada prueba y error proporciona lecciones cruciales que acercan a SpaceX a su objetivo de revolucionar los viajes espaciales y establecer una presencia humana sostenible en otros planetas. La comunidad aeroespacial internacional observa de cerca estos desarrollos, reconociendo tanto los riesgos como las oportunidades que presentan.

By Laura R Manahan

Relacionados